El poder de una torta
LAURA: De lo vivido en las elecciones del domingo pasado, en especial la del Estado de México, se desprenden varias lecciones y un sinfín de lecturas. El dinosaurio sigue ahí, celebrando su pasado y presente y viendo con preocupación su futuro incierto. No duele la victoria del PRI, desconsuela el triunfo de una generación de políticos anidada en la corrupción. A ésa es la que el hartazgo pretendió -y aspira- derrotar.
En lo personal no me entristece que el PRI se haya impuesto, me descorazona que haya ganado esa élite que se adueñó del partido y merced a su voracidad a México se le señala como cuna de ladrones. No me desilusiona que muchos mexicanos vendan su voto por hambre, al final de cuentas somos un país -gracias a la cohorte del poder- de pobres y miseria extrema.
Duele reconocerlo, pero así es. Los intelectuales con sus sesudas consideraciones no pudieron persuadir sobre el cambio. Los artistas que demandaron “ni un voto más al PRI”, igual. Los periodistas libres, también. Perdimos ante una torta, los 500 baros, la tarjeta rosa y una bolsa de plástico con un kilo de arroz, un kilo de frijol, un litro de aceite y una playera.
Fue a todas luces una elección de estado. PEÑA NIETO designó a la secretaria de Desarrollo Urbano y Territorial, ROSARIO ROBLES, ex perredista, como el enlace del Gobierno con la campaña de DEL MAZO. Al secretario de Desarrollo Social, LUIS ENRIQUE MIRANDA (el que no pudo votar, porque su credencial había expirado), fue enviado a la zona de Valle de Bravo, donde hay un alto número de programas sociales. El de Salud, JOSÉ NARRO, a Ecatepec. A varios gobernadores se les pidió ayudar con su gente y dinero en varios municipios. En municipios conurbados de la Ciudad de México trabajaron la llamada “ruta de la leche”, bajo la responsabilidad del director de Liconsa, HECTOR PABLO RAMIREZ PUGA. El director del ISSSTE, JOSÉ REYES BAEZA, en Neza.
Empero, la masa de indignados mandó un mensaje al PRI: ¡Quiero el cambio. No más corrupción. No más impunidad. No más violencia! DEL MAZO, DELFINA, JUAN ZEPEDA y JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA fueron sólo nombres. El fondo fue -y será en el 2018- otro.
El pueblo demanda un cambio, en efecto; pero la realidad enseñó que ese pueblo no hace nada por lo que quiere, no sale a votar y muchos de los que votan se siguen vendiendo por limosmas. La torta de pastel de puerco y el frutsi demostraron gran poder.
Los comicios volvieron a mostrar a una izquierda mezquina que hace alianzas con el PAN, su enemigo ideológico, para agarrar lo que caiga y seguir usufructuando las canonjías y privilegios que el propio sistema ha creado para cooptarla. Por cierto, uno de los que aplaudieron esas alianzas fue FRACO RAMÍREZ, quien pretende una igual para impulsar al panista JAVIER BOLAÑOS como candidato a gobernador de Morelos.
Efectivamente, la maquinaria electoral priista le ganó al hartazgo en el Estado de México. Sin embargo, la palabra de la ciudadanía fue que, con LÓPEZ OBRADOR o sin él, la masa de indignados crecerá en 2018 y el PRI nada podrá hacer contra ella. De entrada, la izquierda y el “no más de lo mismo” avanzaron, aunque las alianzas anti natura ideológica, sin ética, como la del PAN con el PRD en Nayarit y Veracruz, hayan hecho su agosto en río revuelto. En Veracruz obtuvieron más de la mitad de las 112 alcaldías. Ganaron ANAYA y ALEJANDRA BARRALES. MORENA, en Nayarit y Coahuila está en tercer lugar, mientras que en Veracruz se ubica en cuarto sitio con 16 alcaldías, entre ellas la de la capital, Xalapa.
LÓPEZ OBRADOR y DELFINA dicen que acudirán a los tribunales. ¿Y?
JUAN ZEPEDA de la nada logró remontarse al tercer lugar en la votación. No quiso sumarse a la campaña de DELFINA, porque hubo pacto entre él y ERUVIEL AVILA, para ir solo y quitarle votos a MORENA. Si hubiese habido alianza entre PRD y MORENA, otra cosa estaríamos comentando ahora.
ALFREDO DEL MAZO obtiene un “triunfo” muy discutido. El PRI se solaza con el logro de haber conservado su bastión histórico. Todos saben que las irregularidades electorales, la compra de votos, la intimidación y demás marrullerías lo hicieron ganar. Sin embargo, los votos del PRI se desplomaron en 30 por ciento con respecto a la elección de 2011 y gobernará sólo con la tercera parte del electorado.
Sólo votó el 50 por ciento del electorado. De ello, el 37 por ciento más o menos se fue con DEL MAZO; el resto con una izquierda fraccionada (MORENA y PRD), y los demás con el PAN con una JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA que nunca levantó. Es claro que entre Morena y el PRD se llevaron más de la mitad de los votos. Se dice que Morena se consolidó como la gran fuerza opositora, mientras que el PRD vivió un “renacimiento” en Edomex, Nayarit y Veracruz. Claro, gracias a su alianza con el PAN.
El PAN ganó fuerza en Nayarit, pero envió una imagen de derrota en el Estado de México. Mandó un mensaje todavía más importante: Llevó a la gubernatura de Nayarit a ANTONIO ECHAVARRÍA GARCÍA, hijo del ex gobernador del mismo nombre. ¿Con qué honestidad puede denunciar el nepotismo priista?
ENTRE LO BUENO DE todo lo malo es que HUMBERTO MOREIRA, ex gobernador de Coahuila y ex presidente del PRI, se queda sin diputación local plurinominal. Claro, ajuste de cuentas.
¿LEISTE LO QUE DICE la prensa internacional sobre las elecciones del domingo pasado?
Financial Times, The New York Times, The Wall Street Journal, The Washington Post y Los Angeles Times hablan de lo que ocurrió el domingo. Nada bien, por cierto.
CURIOSO que en la noche de la elección haya llegado la noticia de la detención de ROBERTO BORGE en Panamá.
TAMBIÉN CURIOSO QUE YARRINGTON y BORGE NO SE ACOJAN A LA EXTRADICIÓN.
HAY RECUENTO DE VOTOS. Ufa. ¿Ya para qué si todo está hecho?
POR LO DEMÁS, todo normal. La violencia continúa. ¿Viste lo que pasó en el penal de Ciudad Victoria?
P.D.-NO ME BUSQUES LOS PRÓXIMOS DIEZ DÍAS. Necesito, por salud mental, un cambio de ambiente y de país.
armandorojasarevalo@gmail.com