Un millón de amigos
Haber señor gobernador Manuel Velasco Coello, con todo respetín dicho ¿usted cree en verdad que sus gobernados son –somos- estúpidos o lo que le sigue? Y lanzo esta interrogante porque no puedo creer, al menos no en mi sano juicio, que usted le permita a un funcionario de su fallida administración, menester consignar, prosiga con su actividad de “engaña pendejos” como es Enoc Hernández Cruz, a la sazón director del Instituto de Capacitación Tecnológica (Icatech) del Estado de Chiapas; líder (in) moral de un partido como Mover a Chiapas. Ah y debe ser aún, nadie lo ha desmentido, presidente de la Fundación Manuel Velasco Suárez (su abuelo) que mínimo le debe merecer respeto y ahora entre otras subrepticias siglas, constructor de una aberración moral y social como “Quiero tener un millón de amigos” le digo, a usted y su testaferro, están equivocados. No es posible e insisto cualquiera que tenga tres dedos de frente, pueda tragarse el garlito que este señor ande por ahí repartiendo sillas de ruedas e igual despensas, cierto es, a este hambreado pueblo que usted mal gobierna. Sé, lo sabemos, que nada en este estado se mueve sin su complacencia, su complicidad. La pregunta obligada entonces es, se impone ¿qué póctas cree que está haciendo con esta nueva afrenta a los jodidos chiapanecos? Y me refiero a los que el descastado de Enoc hace creerles un mundo mejor regalando playeras, despensas e incluso y estúpidamente, reconoce, él puede hacer lo que ni usted, joven gobernante, puede hacer para que los centros de salud atiendan al peludaje y recibir medicinas. Eso sí al igual que usted, gobernador, va a colonias populares a dar y eso sí calienta, paquetes alimentarios ¿o no? Reitero, a un pueblo hambreado usted lo sabe, Enoc explota. Pregunto ¿cuál la diferencia? Usted gobernador puede ser cualquier cosa menos…menso. Dejémoslo así. De qué se trata, vuelvo a preguntar; qué alguno de sus probables delfines usted estima le cubrirán la espalda como pudiera ser el candidato del morado partido, es decir, su atornasolado flaco; ah y junto con éste la franquicia de Chiapas Unido que regentea el nefasto de Mariano Díaz Ochoa ¿es posible? La chiapanecada está harta de lo mismo pero se es tan pobre de convicción y es a lo que le apuestan, que no dudo que ahora con su abuelo materno compartiendo el templete con el señor AMLO pueda, de menos, salir bien librado. Impune pué. No abundaré demasiado porque consentí, me dije, no hacerla de jamón porque quizá he entendido, como Béker, que todo y todos pueden ser corruptos o corruptibles. Permiso literario. Por supuesto hay excepciones y varias, estimo. Así pues, como decía mi abuela Eda Javier cuando resultábamos incontrolables; ¡síganle cabrones ya verán lo que les pasa! Y la verdad, no entendimos y aquí estoy…estamos. De qué sirve que el pópulo diga que el farsante de Enoc, en un estado como el nuestro jodido hasta el tuétano, un día sí y toda su farsante vida, nos prodigue acciones de benefactor cuándo, esa es la chingadera, quiera hacer creer que los recursos salen de su peculio o de altruistas que coinciden con su “causa”… sea cuál fuere. ¡No mamen! Quiero concluir sin puntos, comas ni acentos en el entuerto provocado por mi encabronamiento, acepto y ustedes dirán, no tiene más propósito que el desenmascarar a un presumible corrupto arropado, tolerado por otro presunto infractor de la ley; Manuel el de acá. Su abuelo; bien gracias. Andrés Manuel el adalid del combate a la corrupción; también bien. Así entonces dijo el que lo dijo; estamos jodidos todos ustedes.
Hoy, sin salida alguna. Me queda claro. Salu2.