Detienen a “El Coreano” en Chiapas por reclutamiento y adiestramiento forzado en el rancho Izaguirre
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 27 NOV.-La Secretaría de Seguridad del Pueblo del estado de Chiapas informó acerca de la detención de Héctor “N”, (a) “El Coreano”, por su probable involucramiento en delitos relacionados con la desaparición de particulares, trata de personas y delitos ligados a organizaciones criminales.
La operación se realizó en coordinación con la Procuraduría General de la República y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, mediante la ejecución de una orden de aprehensión emitida por las autoridades.
La captura ocurrió en el marco de esfuerzos para desmantelar actividades ilícitas vinculadas al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), en especial en el estado de Jalisco y Chiapas. Aunque el comunicado de la Secretaría de Seguridad del Pueblo en Chiapas es escueto, pues no da mayores detalles de esta detención, se afirmó que el susodicho fue ubicado por el Grupo de Reacción Inmediata Pakal (FRIP) en coordinación con la Procuraduría General de la República (PGR), la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Las investigaciones señalan que “El Coreano” es integrante de un grupo dedicado a reclutar y adiestrar a víctimas bajo condiciones forzadas en un predio conocido como La Galera, en Teuchitlán, Jalisco.
Este grupo opera bajo las órdenes de José Gregorio Lastra, alias “El Lastra”, presunto líder responsable del reclutamiento para el CJNG.
La red de reclutamiento también se conecta con actividades de entrenamiento en diversos centros clandestinos, donde las víctimas son obligadas a vivir en condiciones precarias y sometidas a prácticas de adiestramiento físico.
Este caso se vincula a investigaciones sobre un rancho ubicado en Izaguirre-La Vega, Jalisco, lugar donde en marzo de 2025 se hallaron fosas clandestinas y restos humanos tras denuncias anónimas.
El rancho funcionaba como un centro para el entrenamiento criminal y el exterminio, con estructuras diseñadas para mantener a los reclutas en condiciones de hacinamiento y control. La Fiscalía General de la República tomó la coordinación de las investigaciones, que continúan en busca de esclarecer toda la escala de actividades ilícitas vinculadas al grupo criminal.
Rancho Izaguirre, un campo de exterminio y reclutamiento forzado operado por el CJNG
Los colectivos de búsqueda y algunas investigaciones periodísticas, como las recogidas en el libro «Testigos del horror», denuncian que en el rancho se encontraron fosas clandestinas, restos óseos calcinados, cientos de prendas de vestir y calzado, lo que sugeriría un lugar de exterminio.
Se reportó el hallazgo de cuerpos calcinados ocultos bajo una plancha de tierra y ladrillo.
El Rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, México, ha sido identificado por colectivos de búsqueda y diversos informes de prensa como un posible centro de exterminio y reclutamiento operado por el crimen organizado, específicamente el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El 15 de marzo de este año, madres buscadoras hallaron restos calcinados, cientos de zapatos y objetos personales al interior de un predio en Jalisco, identificado como el rancho Izaguirre, a unos kilómetros fue cateado un lugar similar, en la localidad de La Vega.
El hallazgo del campo de entrenamiento del crimen organizado ocurrió gracias a que una llamada anónima alertara al colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, las imágenes de lo encontrado inundaron las redes sociales y en algunas de ellas, además de los objetos, presuntamente también había cartas de los que en vida permanecieron ahí. Hasta el momento, según el último reporte oficial, hay 19 detenidos y los restos encontrados no han podido ser identificados; 10 de ellos han sido ya sentenciados a más de 141 años de prisión y se les impuso un pago de 1.3 millones de pesos como reparación del daño.
Sin embargo, las autoridades federales, incluyendo la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), han negado que el rancho fuera un campo de exterminio, argumentando que los indicios apuntan a un centro de adiestramiento para nuevos reclutas del cártel.
No obstante, un presunto operador del rancho, conocido como «El Lastra», declaró tras su detención que sí se asesinaba a quienes se resistían al entrenamiento o intentaban escapar, pero que el propósito principal era el adiestramiento.
Noticias/Diario Tribuna Chiapas/2025

