Demasiados huecos, confusiones y molestia, genera la ley de Residuos Sólidos (uso de bolsas de plástico).

Lulú Ovilla

28 de septiembre 2020.

En los primeros días de este año, la Secretaria de Medio Ambiente (SEDEMA), dio a conocer la nueva Ley de Residuos Sólidos en la ciudad de México, habrá sanciones de 42 a 170 mil pesos, esta nueva ley consiste en la comercialización, distribución de bolsas de plástico, pero existen errores garrafales en esta ley, por ello, empresas, chicas, medianas y grandes, están siendo extorsionadas, debido a que más que una ley parece una campaña ecológica.

Permea el desconocimiento en cuanto a que tipo de bolsas se deben de utilizar, debido a que existen demasiados huecos en esta ley, la Directora de Evaluación de Impacto y Regulación Ambiental de la SEDEMA, ha dicho que en México se dará el ejemplo al mundo, pero no podemos ser ejemplo de nadie, cuando esta ley permite la extorsión y la duda en su uso, comercialización y distribución.

La SEDEMA, ha dicho tajantemente y hasta suenan arbitrarios, cuando se refieren al consumidor: no permitiremos que se comercialice, ni que se distribuya, ni que se le entregue al consumidor una bolsa de plástico en ningún sitio de venta, hay que aclararle a la Secretaria de Medio ambiente, que los supermercados aun entregan bolsas de plástico, hacen su agosto vendiéndolas y no conforme con eso a cada bolsa le imprimen el logo del supermercado, obligándonos a una publicidad gratuita.

Entonces quién le debe de cobrar a quién, las bolsas son una venta ilegal cuando nos están imponiendo un logo todas las empresas, si antes todas las tienditas, supermercados, comercios, etc.etc., daban bolsas en la compra de cualquier producto comestible o no, porque no dar las bolsas ecológicas si son más económicas, porque obligar al consumidor a comprarlas, si deben darlas de manera gratuita, es una responsabilidad que están evadiendo de manera irresponsables.

Pero los culpables no son las empresas, ya que ellos no legislan las leyes, este problema recae directamente en los Diputados y Senadores, quienes solo copiaron y pegaron la Ley de Residuos Sólidos, acá viene querido lector porque le digo esto: de acuerdo con José del Cueto, Presidente de la Asociación Nacional de la Industria del Plástico (ANIPAC), hubo una iniciativa que presentaron en la Asamblea General con algunos conceptos, y cuando se publicó el dictamen ya lo habían cambiado completamente.

Que fue lo que hicieron, cambiaron únicamente la regulación de plásticos de un solo uso de la Unión Europea y dijeron: les demos 6 meses para que se adapten a esta aplicación, todo fue hecho al vapor y mal,  ya que no especifican que tipo de bolsas de plástico son las que se prohíbe en su distribución, expertos coinciden en que las medidas no son suficientes por la forma en que se están llevando a cabo.

Para que esta nueva Ley de Residuos Sólidos, realmente sea una ley y no suene únicamente a una “campaña ecológica”, se requiere de una buena planeación estratégica, cosa que no hicieron, necesitan involucrar a los representantes de todos los sectores que tengan que ver con el plástico, como: empresarios, sociedad civil y políticos, con la única razón de que todo sea funcional y su aplicación sea correcta y no estar inmiscuidos en extorsiones, discusiones y estar pasando malos ratos en los supermercados porque todo te lo entregan en la mano.

La industria del plástico representa para nuestro país 30 mil millones de dólares, existen 180 iniciativas en contra del plástico y en el 2018 cerraron con números negativos, esto ha permitido que la industria se encuentre en problemas, por lo tanto 50 empresas han tenido que cerrar sus puertas y las que se mantienen abiertas únicamente se encuentran trabajando al 30 o 40 por ciento de su capacidad.

El mayor número de empleos en México lo genera la industria del plástico a través de la producción de bolsas, los afectados por esta nueva ley hecha al vapor y mal hecha, afecta a 4 mil empresas y casi 50 mil empleos, solo el 18 por ciento de los comerciantes establecidos dijo conocer la Ley de Residuos Sólidos y el 90 por ciento que fueron consultados tienen algún tipo de duda con respecto al uso de plástico de forma general.

Porque digo que esta ley que prohíbe el uso de las bolsas de plástico esta no mal, sino muy mal, por ejemplo: en el caso de las tintorerías no son claros ya que en ese tipo de empresas usan fundas y la SEDEMA dice: son bolsas, pero eso cae en una interpretación sobre dicha ley, ¿eso que significa?, pues que no hay ni criterios ni claridad  y si demasiadas confusiones.

Se ha dicho que la única opción es usar las bolsas compostables, pero muchos ni saben de que les están hablando, desconocen el término “compostable” y es válido, lo que no es válido, es que no exista un reglamento ni una norma que especifique que bolsa serán consideradas compostables y al haber esa confusión se presta a que su uso y distribución sea incorrecta y por ahí se desencadena toda una ola de extorsiones bajo el amparo de una ley mal hecha.  

Según las autoridades ambientalistas, no cuentan con capacidad ni recursos para certificar que las bolsas que se han vendido en este 2020 sean compostables, ya que el costo de su estudio asciende a 20 mil dólares  y tarda mucho tiempo en realizarse, entonces se hizo o no al vapor la nueva ley y por si usted no sabía, el costo de una bolsa compostable es de 8 a 10 veces más caro que una convencional y esa es la razón por la que se la están cobrando al consumidor y por si fuera poco, no son reutilizables ni reciclables. 

Ahí no termina todo, con las bolsas compostables no se puede hacer composta, ya que existe un límite de incorporación en los centros de procesamiento de residuos y lo más que puede llegar es aun 1.5 por ciento en el mejor de los casos, lo que significaría que lo que se produciría en un día, si fuera compostable no se podría procesar de manera correcta, todo esto dicho por verdaderos expertos en la materia, fue demasiado irresponsable decir que en el primer dia del 2020 se iba a tener todo al 100 por ciento, cuando eso o es cierto.

La SEDEMA, está totalmente cerrada a cualquier propuesta que le presenten los expertos en el plástico, una de ellas es: seguir utilizando las bolsas actuales que son 100 por ciento reciclables y posteriormente ir incorporando de manera gradual una cantidad de material reciclado hasta llegar al 2025 con el 50 por ciento, pero siguen de obstinados sin reconocer sus errores, cuando lo que deberían de hacer es precisamente ir corrigiendo los puntos malos y reconocer con humildad sus fallas.

Los mayores depredadores de la ecología de nuestro país son precisamente los políticos del Partido Verde y la muestra de ello es precisamente el desconocimiento que tienen ante su iniciativa de ley para la prohibición del uso de bolsas de plástico, según ellos en un hecho histórico para México, lograron su aprobación  con 51 votos a favor, lejos de darles vergüenza por copiar y pegar una ley tan importante como es el asunto del impacto ecológico que produce el uso de bolsas de plástico.

La Diputada local por el Partido Verde de México, Alessandra Rojo de la Vega, fue quien presento la iniciativa a la Reforma al artículo 3 de la Ley de Residuos Sólidos de la ciudad de México,  enarbolando en todo momento la bandera del ecologismo, según ellos han marcado un hecho histórico  al realizar una ley con demasiados errores, se aventaron la puntada de reformar una ley solos, sin los verdaderos expertos, solo los que a su “juicio” se prestaron  aplaudirles  y quizás con algún interés de por medio.

Porque digo que solo se aventaron la puntada y porque son los mayores depredadores  de la ecología, por la sencilla razón de que: con la fabricación de una bolsa de papel se necesita cuatro veces más energía, que para una de plástico,  el papel requiere de la tala de árboles, se tiene que utilizar transporte de carga pesada, que implica un gasto mucho mayor de energía y se añade el uso del carbono, por ultimo emite gases  de forma directa o indirecta, demasiados contaminantes, depredación y no se dieron cuenta.

Debido a que la Ley de Residuos Sólidos está causando demasiados problemas empresarios han recurrido al amparo a través del Artículo Quinto de la Constitución, por el trato discriminatorio al preferir el uso de otro tipo de bolsas, la violación a la libertad de trabajo, consagrado en el artículo en mención, argumentan también la violación al Artículo 26 Constitucional, ya que atetan contra la libertad económica y la desalienta, se ataca a la ley por emplear tecnicismos que generan dudas y confusión, como son las palabras “biodegradable”, “compostable”, “micro plástico.

Algo que no entendió ni la SEDEMA, ni los Diputados del Partido Verde, fue que más que echar andar una nueva Ley de Residuos Sólidos, se trataba únicamente de regular, no de prohibir,  existen datos que apuntan a que las bolsas de algodón y compostable, generan más problemas al planeta, existe un error de concepción y deben de reconocerlo y corregirlo, la cruzada mundial contra la contaminación del planeta debe de seguir y nadie se opone a ella, pero cuando decidan hacer algo a favor, que lo hagan bien.

Que especifiquen muy bien en que casos no se debe de utilizar el plástico y sus derivados, para que se pueda corregir el daño económico y laboral que ya se está resintiendo, afortunadamente la depredación ambiental todavía no sufre daños por esta nueva ley, deben de resolver de la mejor manera este  problema por el bien de todos y no generar otro mayor solo por hacer las cosas al ahí se van y cuando hagan leyes que sea para beneficio de todos y no para unos cuantos.

Nos leemos el próximo lunes.