Por Carlos Rafael Coutiño Camacho.

1.- Claudia Sheinbaum

2.- Congreso de Chiapas

Claudia Sheinbaum Pardo, asumirá en unos días más, la presidencia de la República, en ese sentido, hay que manifestar que tiene un tema por demás importante que tratar, incluso por encima de la beligerancia de los grupos del narcotráfico, me refiero a Chiapas, donde hay que subrayar hay una deuda histórica.

          Para quienes me leen, hay que decir que los documentos históricos y de la CNDH, señalan que Chiapas ha sido parte de México en dos ocasiones y no una sola, como muchos creen, luego entonces, si este territorio decidió sumarse a esta república, fue porque los chiapanecos querían vivir en mejores condiciones.

          Ese fue el pacto que se mencionó en aquel entonces desde la época de Agustín de Iturbide, desde entonces, pareciera ser que al paso del tiempo, estas tierras quedaron solo ahí, para que el país mexicano se presentara como una gran nación en cuanto a su extensión territorial, pero no para beneficiar a sus pobladores.

          Dentro de la historia, marca claramente que así como los mexicanos siguen protestando por el arrebatamiento de las tierras en la parte norte por Estados Unidos, literalmente ocurrió lo mismo con Chiapas, al amenazar con invadir, sino se anexaban a ellos, por eso la urgencia de decidir si eran mexicanos, guatemaltecos o independientes.

          Pues bien, Claudia Sheinbaum, hoy tiene ese enorme reto de poder trabajar por los derechos no solo de los indígenas, como se presentó ya en el Congreso federal y próximamente en el Senado, hoy se tiene que atender cada uno de los rubros que le preocupa a la ciudadanía.

          Uno de esos temas, está la educación, es decir asegurar que la población cuente con la calidad necesaria; en salud, observar que los medicamentos estén en tiempo y forma, lo mismo que los hospitales con en buen estado y con médicos capacitados en el rubro que les corresponde, atender el tema de la cultura, que por cierto la misma Sheinbaum, dijo sentirse admirada a su paso por Chiapa de Corzo.

          Otras acciones, está en el desarrollo de este pueblo, sobre todo de los ya urbanizados, donde no se concentre maquiladoras, porque es claro que es un insulto a las mujeres en particular, como se ve en la frontera norte del país, sin embargo si hay mucho que atender en turismo por ejemplo.

          En cuanto a los pueblos indígenas, que no les falte agua, energía eléctrica, desde luego la tecnología, entre muchos más como parte de su inicio al desarrollo real, eso sí, sin que esto signifique la auto destrucción de sus costumbres y por el contrario, que reafirme la tradición de los pueblos autóctonos.

          Chiapas no es mexicano entonces para ser explotado, como ocurrió con otros gobiernos, hoy Sheinbaum, tiene todo para potencializar a este espacio, Chiapas no dejará de ser mexicano que quede claro, pero también no dejará de insistir en su necesidad de transformación al gobierno federal.

          Claudia, si quiere pasar a la historia, no como ahora lamentablemente la hacen ver, lo cual es ridículo, que es la primera mujer presidenta, por un tema de igualdad de género; en realidad debe pasar, por su capacidad, su estoicismo, su deseo, incluso por su esa enseñanza de sus propios padres y amor al país.

          Es así, como hay que entender que, no es de ninguna manera, decir viva México desde Chiapas o desde el centro del país viva Chiapas, eso es trivial, lo que importa es que se consolide, no si somos Chapas, indios o cualquier otro señalamiento que según afecta a los sentimientos de los ciudadanos oriundos de esta tierra.

CONGRESO LOCAL

El Congreso de Chiapas, inicia mal, pues no se entiende como se pone al margen personas que pueden ser pieza fundamental para leyes que den origen a una nueva estructura legal, como es el caso de Tere campos y su equipo de trabajo, para dejar que esté ocupando un cargo, una sola familia, ya por años una curul.

          Dentro de los que estarán trabajando este 1 de octubre, de los 40, hay que decir, 20 seguramente traen ya una agenda y sin duda está bien fundamentada, algunos por la experiencia dentro del gobierno del estado, otros más como políticos y legisladores, incluso hay quienes desde la Iniciativa Privada, saben que son pieza clave en la política de Chiapas.

          Ante ello, no se puede soslayar que, se está en un proceso importante sobre el futuro que viene, como se ha dicho ya, tanto Ignacio Avendaño Bermúdez en la Mesa Directiva y de Mario Guillén en la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), saben bien que están en un papel crucial, y si ambos son designados, es por su valía en este congreso.

          Pero vuelvo al inicio, Tere Campos, al quedar fuera, deja una estela de preocupación, del cómo aún las cosas siguen siendo un error en el Poder Judicial, no se entiende, como por un acto de injusticia, se pone al margen a personas con gran valía en la sociedad y que sería la parte central de un análisis sobre los trabajos legislativos.

          Quienes llegan, tendrán que trabajar para reconstruir a Chiapas, no porque se haya devastado en esta administración, por el contrario, Rutilio hizo más de lo pensado, y que al final el pueblo terminará por reconocer, lo que digo, es que, después de una “guerra” entre el mal gobierno, se levantó los escombros, se limpió y se actuó en consecuencia, hoy Eduardo Ramírez, hará no cimientos, sino edificaciones claras y precisas.

          El Congreso de Chiapas, tiene una labor importante, saber legislar, saber atender los temas sociales, y sí quiero enfatizar en algo, que entiendan que legislar, no es hacer eventitos, no es lucir la vestimenta, no es ir a tomar café y galletas, es crear leyes, pero que estas, sean las que el pueblo necesita.

          Leyes que en verdad estén diseñadas para un progreso, no leyes al gusto y pensar de un diputado, no aquellas que se piensa que puede funcionar algún día, y es que en el tintero, hay leyes que nunca pasaron porque no tenían razón de ser o porque no convenía al gobierno en turno, otras más solo quedaron como propuestas.

          De acuerdo a lo que se ha dicho, en Chiapas hay más de 3 mil leyes, solo en la última década, se presentaron tantas que las únicas que son aplicables, está la del código civil, penal y de procedimientos penales y civiles, el resto es un adorno, como la propuesta a quienes pintaran en la vía pública, los bloqueos, el rescate de monumentos y tantos más.

          El Congreso, cierro diciendo, ya debe ser un lugar de trabajo, donde no se convierta más en mercado público con la venta de pantaletas, zapatos, bolsas, aretes, blusas, brasieres, y hasta pasarela de negocios particulares y empresas que nada tienen que hacer en un recinto como este.